domingo, 7 de agosto de 2011

Sancho y su nueva insula...


Estaba pensando en Sancho, y me di cuenta que el ahora debe mantenerse limpio y aseado, no debe comer nada que le de mal aliento, tampoco puedo comer my rapido ni demasiado porque puede dar una mala impresion, tambien debe evitar sus refranes ya que lo harian quedar muy mal. Le dije que debe gobernar muy bien porque una mala decision puede hacer que se sienta culpable. Cuando Sancho escucha esto me dijo que prefiere no ser el gobernador de la insula para evitar que yo tome malas decisiones, asi que le respondi que el es merecedor de mil insulas porque sus razonamientos son sabios y acertados. Cuando Sancho se fue a su insula se despidio de todos y inicio su camino. Con nosotros iba el mayordomo pero Sancho me dijo que el habia sido la Trifaldi lo que me parecia algo contradictorio y frustante. Me quede solo en la marcha de Sancho, la Duquesa me ofrecio un par de sirvientas pero las rechace porque soy un caballero andante y no necesito ninguna doncella. Justo antes de acostarme vi una doncella por mi ventana, Altisidora, quien me canataba una cancion muy romatica. Cuando me di cuenta de que me estaba declarando su amor, le dije que yo ya tenia una dama y que no lo seria infiel, asi que le reafirme mi amor por Dulcinea. Sancho llego a Barataria, a donde fue recibido con mucho cari;o, lo llevaron a la iglesia ahi le dieron las llaves de la ciudad y lo nombraron gobernador. En ese momento comenzo a ejercer lo llevaron al juzgado a donde comenzo a atender a los habitantes de la insula.
El primer juicio fue asi: un se;or fue a donde un sastre para que le hiciera una caperuza, pero era muy desconfiado y no queria que el sastre se dejara el sobrante de tela, entonces le dijo que la gastara toda haciendo caperuzas. El sastre hizo 5 caperuzas pero muy peque;as para poder usar toda la tela. Entonces es sastre queria el dinero por hacer las 5 caperuzas y el hombre queria la tela completa. Sancho finalmente decidio que ninguno tenia la razon ya que ambos habian sido muy desconfiados.
La segunda historia contaba: un hombre la habia prestado a otro diez ducados pero este no se los queria devolver a su due;o original porque decia que ya se los habia devuelto. El primero le dio al segundo una ca;a y juro ante todos los que estaba en el lugar que ya le habia devuelto los diez ducados, asi que le dijo que con la ca;a ya estaba pago. La sorpresa de todo fue que cuando el hombre rompio la ca;a habian dentro diez ducados.
El tercer caso se decia lo siguiente: una mujer llego ante Sancho y le dijo que un hombre la habia obligado en mitad de un camino. El hombre le dijo que la mujer se habia ofrecido y que ya le habia pagado lo suficiente por esos trabajos. Sancho le dijo al hombre que le diera una bolsa que tenia llena de dinero. Al rato llegaron nuevamente y la mujer no pensaba soltar la bolsa por nada del mundo entonces se dio cuenta que seria muy dificil que la hubieran forzado en el campo. Asi que finalmente Sancho le devolvio la bolsa de dinero al hombre. Un dia me encontre a Altisidora y a una amiga de ella. Altisidora se desmayo para llamar mi atencion, asi que le dije a su amiga que yo mismo me quedaria con ella para que se dejara de ilusiones. En la noche comenzo nuevamente los cantos de amor, en los que ella me decia que no me iba a dejar por nadie ni nada. Fue entonces cuando escuche un gran estruendo en mi habitacion y fui corriendo a ver que sucedia en ella, y estaba todo oscuro asi que comence a atacar a los encantadores y magos pero entonces algo se subio en mi cabeza y me mordio y ara;o.
En la insula de Sancho era la hora de comer y sus sirvientes comenzaron a llevarnos la comida al gran palacio, pero el peque;o inconveniente era que cada plato de comida que llegaba a Sancho el doctor que estaba a la par de el insistia en que se lo llevaran ya que el no podia comer eso. Pero entonces cuando finalmente habia un plato que Sancho podia comer, llego una carta del Duque que decia que habia una conspiracion en contra de el entonces que mejor no comiera. Asi que tuvo que comer solo un racimo de uvas y un poco de pan. Fue entonces cuando llego un labrador mientras Sancho comia el poquito de comida que podia comer, este labrador lo comento a contar la historia de su vida. Sancho le pregunto despues que era lo que queria, entonces el labrados le pidio a Sancho 300 o 600 ducados para poder celebrar la boda de su hijo, para que el consuegro lo aceptara. Sancho se enojo tanto, nunca lo habia visto tan enojado, que el medico le dijo que le daria de comer para que no volviera a sufrir al enojo similar. En una de las noches escuche que alguien entraba en mi habitacion de manera muy silenciosa, pense que habia sido Altisidora asi que me puse de pie en mi cama, pero cuando vi que era la due;a Rodriguez me asuste mucho. Fue entonces cuando ella me dijo que me necesitaba para fines caballerescos. Ella me conto su historia que era que ella tena una hija que habia sido seducida por el hijo de un siervo del Duque; el le pidio matrimonio a la hija de la due;a, ella me conto que le habia pedido ayuda al Duque pero que el tenia algunos negocios sucios con el labrador asi que no le habia ayudado. En un momento la due;a comenzo a hablar de Altisidora y de la Duquesa, despues de esto las luces se apagaron las luces de manera extra;a y comenzaron a sentir pellizcos, despues de esto los pellizcos cesado. La due;a salio de mi cuarto llorando y yo no me podia explicar que fueron los entra;os encantamientos que amobos habiamos sentido. Sancho hizo una ronda en la noche para poder ver la gente que habitaba en su insula, y eliminar a las malas personas, primero vio a un muchacho que le dijo que nadie podria hacer que el durmiera ni una sola noche en la carcel, entonces Sancho le pregunto que si era por la falta de autoridad y el dijo que no es que simplemente no dormiria en la noche. Despues conocia a una muchacha que andaba vestida de hombre, le pregunto que porque se vestia asi, ella respondio que su padre no la dejaba salir desde la muerte de su madre entonces su hermano y ella se cambiaban de ropa para poder salir. Sancho al escuchar esto llevo a la muchacha a su casa. Habia demostrado a todos los habitantes que era un gobernador muy sensato.